Si un adulto o un niño no está respirando normalmente, encuentre el punto de compresión.

• Arrodíllese junto a la persona.
• Utilice sus dedos para localizar donde termina el esternón de la persona, en donde se unen las costillas.
• Coloque dos dedos en la punta del esternón.
• Coloque la base de la otra mano encima de los dedos (del lado más cercano a la cara de la persona).
• Utilice ambas manos para dar compresiones. Ponga su otra mano encima de la mano que acaba de poner en posición. Entrelace los dedos de ambas manos y elévelos para que no toquen el pecho.
• La razón de compresión es de al menos 100 compresiones por minuto.
• Si sabe RCP y está dando respiraciones de rescate, dé 30 compresiones por cada 2 respiraciones.